Frente a la problemática surge la duda:
¿Qué hay en la mente del que debe manejar lo que parece ser inmanejable?

Esta semana en Bogotá se evidenciaron aspectos referentes a la privatización de fondos y la aplicación de políticas públicas, las cuales llegan a intervenir en la cotidianidad de los ciudadanos generando significativa disminución en lo que invierten con base en el aumento de precios, un claro ejemplo es la propuesta de peajes alrededor de Bogotá¹ para recoger fondos los cuales se destinarán a obras públicas, cuando el alcalde actual del distrito propone una “Bogotá mejor para todos”, automáticamente llegamos a pensar ¿quiénes son todos?

Si los peajes se realizan en futuro representaría un hecho negativo en términos económicos tanto para los consumidores de productos provenientes de afuera como para las personas que vivan fuera de esta ciudad, este tipo de medidas pueden generar un tipo de barrera comercial. Es importante resaltar que Bogotá al ser la capital del país, se convierte de forma casi automática en uno de los centros de mayor encuentro entre productores y consumidores, lo cual debe llevar a pensar al gobierno distrital a facilitar dicho encuentro, no a complicarlo.

Cerrarse a nuevas dinámicas, al momento de sumergirse a un enfoque en el cual se tiene como objetivo primordial aumentar los ingresos de Bogotá, impide al gobierno local desarrollar y sacar a la luz toda su capacidad estratégica para dar con las problemáticas sociales, culturales y también políticas. Estar concentrados en un solo un aspecto llega a generar indiferencia no sólo por parte de los gobernantes, sino de los ciudadanos, pues al no observar y reconocer las fallas e impacto que presentan pueden llegar a desencantarse de la bella Bogotá para todos.

Siendo el actual alcalde una persona la cual ha ejercido el mandato en el pasado, conlleva a que vuelva a ejecutar o plantee propuestas hechas anteriormente, las cuales siguen teniendo corte privado como las solicitudes entorno a los colegios que se encuentran siendo estudiadas por el consejo para la su aprobación², estos colegios no son de corte público, ni presentan resultados significativos en el examen saber 11, entonces cuál es el fin de pedir la aprobación de dinero o fondo público. ¿Cuál es el papel del consejo en asuntos de este tipo? Si es el ente encargado de controlar y supervisar el plan de gobierno y aprobar los puntos que están propuestos en el mismo, es vital que aun cuando los aspectos estén propuestos con anterioridad, el consejo prevea las consecuencias que tendrá este, pues a medida que avanza dicho gobierno se siguen postulando propuestas que podrían llegar a tener un gran impacto en el estado de la ciudad, afectando en el proceso en el que se llevan a cabo las relaciones económicas entre ciudadanos.

Este tipo de propuestas, son algunas de las distintas que ha hecho hasta el momento el señor Alcalde durante estos meses de gobierno, donde ha mostrado que cuidar el sector privado es una de sus prioridades, donde el gran perjudicado ha sido el bolsillo de los habitantes de la capital de clase baja o media. Propuestas que pueden verse y oírse bien, pero el medio para lograr la mayoría de ellos es el donde se le hace la rosca a cada bogotano, sin ningún tipo de compasión. Razón por la cual fue llamado a declarar.³
Encontrar los medios para recaudar ciertos fondos, los cuales a su vez se inviertan de una forma acorde a las necesidades y demanda de los bogotanos sin perjudicar o desestabilizar el consumo de bienes y servicios, es algo que se debería plantear constantemente en la mente de señor alcalde, lastimosamente no sucede.